viernes, 14 de septiembre de 2007

Crónica del CEDI - Parte 3

Se acabo el CEDI, al fin, así que hoy ultima entrega de mi crónica.


JUEVES 13
A estas alturas empiezo a pensar que la C de CEDI significa Coñazo y no Congreso, y es que atención a la conferencia con la que me tengo que levantar: El mundo de la informática ¿Influye ser mujer?. Ya el titulo hace denotar la clásica conferencia sexista de ultra-feministas intentando demostrar las diferencias sexuales que se hacen a la hora de buscar trabajo en el mundo de la Ingeniería Informática. Pues no, no es eso, es aun peor, se ponen a hablar del porcentaje de mujeres que usa internet respecto al de hombres o de para que lo usa cada sexo y cosas de esas. En fin, las diferencias sexistas seguiran existiendo mientras la gente hable de ellas.

Y a la hora de comer nos dan unas invitaciones que muchos esperabamos que acabaramos recibiendo los voluntarios, se trata de una invitación a una cena de clausura en la finca Sansui (más conocido por mi como finca Shin-Chan), una cena valorada en 120 euros en una de estas fincas que se estan poniendo de moda para celebrar bodas y bodorrios.

Llegamos al lugar en autobuses desde Capitania y me encuentro en un lugar paradisiaco, precioso y mogollón de romantico. Imaginad un parquecillo lleno de palmeras, unas fuentes muy espectaculares, una iluminación relajante, un lago con cisnes, una orquesta de jazz, velas en las mesas y todo acompañado de una noche con un clima perfecto, ni frio ni calor. Un paraiso romanticista situado en mitad de la carretera, lastima del contexto en el que estaba ahí, pero hubiera sido capaz de quedarme toda la noche oyendo el sonido de las fuentes y los grillos e inmerso en mis pensamientos.

La cena, no mucho que contar debido a mi nula pasión por los alimentos, es decir, muchos aperitivos, mucha comida de diseño y veintemil copas en la mesa, muy propio de una cena de boda por ejemplo. A fin de cuentas es para lo que sirve la finca Shin-Chan.

Y hubo una cosa al finalizar la noche que me impacto mogollón, durante todo el aperitivo estabamos con la orquesta de jazz, pero lo cierto es que no les hacia mucho caso, pero hubo un rato en que estando con mis compañeros de clase, estos empezaron con la clásica conversación aburrida, repetitiva y casi a diario sobre el software libre. Entonces, yo me fui... y me fui solo a una mesa con una vela, a escuchar a esa pequeña orquesta de jazz.

Tengo que reconocer que nunca habia escuchado jazz en directo, pero me impresiono mogollón la experiencia, es una música que habla sobre la tristeza (a veces se le llama el hermano triste del blues) y no se si era el ambiente del lugar, la música, la noche o posiblemente un poco de todo pero me puso mogollón de triste. Es tal vez algo dificil de entender para la gente que no vive el arte, pero veias a cualquiera de los musicos, tocando siempre en un estado de tristeza, sacando sus sentimientos como una agonia, con los ojos cerrados, sintiendo cada nota, llorando por cada corchea.

No se, como digo me impresiono mucho, tal vez porque mi afición siempre ha sido el Rock y este viene del blues y por tanto siempre habla de amor, por lo menos el buen rock, sin embargo el jazz es sobre la tristeza. Es sorprendente. Podria dedicar 20 articulos en el blog a hablar de lo que senti escuchando jazz.

VIERNES 14
Toca grabar de nuevo, por suerte hoy ha sido bastante más corto de lo habitual, era una breve charla sobre las futuras ediciones del CEDI y la ceremonia de clausura. Luego a comer, sorteo de premios (que evidentemente no me ha tocado nada) y a recoger.

Y llega el momento de la reflexión final para sacar conclusiones, no me ha gustado la experiencia del CEDI, me ha quedado un sabor muy amargo. Creo que ha sido por las siguientes razones:

1) He visto que no es bueno comprometerse a algo con mucho tiempo de antelación, las ganas con las que me apunte y las pocas que llevaba llegada la fecha eran de una diferencia abismal.

2) Soy posiblemente uno de los voluntarios que mas ha trabajado, ya que mi trabajo era muy activo, estar todo el rato grabando, el de mis compañeros era bastante más pasivo, en plan de pinchar un powerpoint y estar dando vueltas y charlando con la gente. De hecho siempre llegaba a la comida cuando todo el mundo ya estaba acabando de comer.

3) Hoy ha sido muy triste, ver cuanto amiguismo se ha creado entre los voluntarios, como habia por ejemplo chistes que todo el mundo entendia menos yo y como todos conocian a todos, y es que me he pasado todo el CEDI encerrado en la sala Mozart teniendo como unica amiga una camara miniDV y sin poder charlar ni conocer a nadie.

Conclusión de todo esto: Estoy fuera de juego, totalmente. Ya no encajo ni en el mundo de la informática, ni en el mundo en general.

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