No es Zaragoza, pero poco nos falta xD
Es estúpido hablar del tiempo. Es el típico tema de conversación de la gente que no tiene nada que contar, por ello se emplea en conversaciones de ascensor, salas de espera o viajes en bus. Yo hoy voy a hablar de ello, así que no se si realmente tengo que algo que contar. Posiblemente no xD.
Desde hace unos días, mi ciudad esta siendo recorrida por el cierzo, ese viento helador con dirección noroeste y que hace que cariñosamente (esto de cariñoso no me lo creo ni yo) la gente de Huesca nos llame cheposos. Por aquello de que cruzamos el puente de piedra encogidos del frio del cierzo.
Razón no falta. Hoy hace un día muy soleado y sin embargo no apetece salir a la calle. Ayer fue la Cincomarzada, fiesta en estas tierras y fue cancelada por el peligro que ocasionaba el viento. Flipad. Seguro que muchos de los que leyais esto y seáis de otras ciudades sabréis de eventos cancelados por fuertes lluvias u otros femonemos, pero ¿Por viento? Zaragoza es peculiar hasta para eso. Aunque si estuvieras aquí, sabríais que razón para esa cancelación no faltaba.
Lo curioso es que estamos obligados todos los años a convivir con este viento y como algo con lo que vivimos, dicen que afecta a nuestro carácter. De ahí que luego nos digan que en Zaragoza somos cabezones, matracos y amargados. Razón tal vez no les falte, y sea causa del viento todo.
No sé si el viento u otra razón, pero aunque soy zaragozano, reconozco que el carácter de la gente de aquí es peculiar, con una mentalidad que me resulta extraña, cerrada y en la que muchas veces me siento extranjero. Por supuesto no es generalizable a todo individuo, pero si es común encontrarte con ello a diario. También reconozco que no he vivido nunca fuera de esta ciudad, y tal vez sea algo más propio de España que de Zaragoza.
Espero que la lluvia de Cork no afecte también al carácter.
Desde hace unos días, mi ciudad esta siendo recorrida por el cierzo, ese viento helador con dirección noroeste y que hace que cariñosamente (esto de cariñoso no me lo creo ni yo) la gente de Huesca nos llame cheposos. Por aquello de que cruzamos el puente de piedra encogidos del frio del cierzo.
Razón no falta. Hoy hace un día muy soleado y sin embargo no apetece salir a la calle. Ayer fue la Cincomarzada, fiesta en estas tierras y fue cancelada por el peligro que ocasionaba el viento. Flipad. Seguro que muchos de los que leyais esto y seáis de otras ciudades sabréis de eventos cancelados por fuertes lluvias u otros femonemos, pero ¿Por viento? Zaragoza es peculiar hasta para eso. Aunque si estuvieras aquí, sabríais que razón para esa cancelación no faltaba.
Lo curioso es que estamos obligados todos los años a convivir con este viento y como algo con lo que vivimos, dicen que afecta a nuestro carácter. De ahí que luego nos digan que en Zaragoza somos cabezones, matracos y amargados. Razón tal vez no les falte, y sea causa del viento todo.
No sé si el viento u otra razón, pero aunque soy zaragozano, reconozco que el carácter de la gente de aquí es peculiar, con una mentalidad que me resulta extraña, cerrada y en la que muchas veces me siento extranjero. Por supuesto no es generalizable a todo individuo, pero si es común encontrarte con ello a diario. También reconozco que no he vivido nunca fuera de esta ciudad, y tal vez sea algo más propio de España que de Zaragoza.
Espero que la lluvia de Cork no afecte también al carácter.
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