sábado, 25 de octubre de 2008

Nunca crei que los volveria a escuchar...

...pero que Dios bendiga a la reina.

Queen. Sin duda, para mi uno de los mejores grupos de la historia de la música. Pero bueno, eso es algo que todos los que me conocéis, sabéis de sobra. Fui al musical de Queen, al concierto que hicieron sus imitadores: God save the Queen, llevo una camiseta muchas veces en las que pone "We will rock you" y además me compre toda la discografía que daba el País.

El día antes de venir a Cork me entere de una noticia que me dejo sorprendido y era el lanzamiento en Septiembre de un nuevo disco de Queen. Evidentemente, este disco no podía contar con Freddie Mercury quien falleció hará casi dos décadas. Pero la explicación a este lanzamiento era la presencia de Paul Rodgers, cantante con el que el resto de integrantes de Queen llevan desde hace bastante tiempo trabajando en una gira que incluye temas de ambos grupos bajo el nombre Queen+Paul Rodgers.

La química ha funcionado, y esto ha causado el resurgimiento desde las cenizas para crear el comienzo de una nueva etapa bajo el sello Queen+Paul Rodgers. El disco ya esta en el mercado, bajo el nombre "The cosmos rock" y vale, es cierto, no estará Freddie Mercury y eso siempre hará que sea irrepetible. Pero escuchando este disco, he vuelto a escuchar a Queen, no sólo en el estilo de la música sino incluso parece que el fantasma de Freddie viva dentro de la banda con letras que pensaba sólo podía componer él como es la del single Small que os dejo a continuación.


Supongo que Freddie Mercury sigue viviendo en el resto de los integrantes de Queen. Yo desde luego, espero que este Queen+Paul Rodgers sea el primer disco de una nueva y larga etapa.

Os dejo algunos de los otros singles más importantes del disco

C-lebrity


Say it´s not true


viernes, 24 de octubre de 2008

Mis 22 años a 24 fotogramas por segundo

El señor Kenobi aficionado a las drogas chungas del tipo meme. Me ha pasado una que como buen bloguero, he de completar y enviar a otros.

Este meme es bastante simple, se trata de partir de tu año de nacimiento (1986 en mi caso) y empezar a contar por cada año cuál crees que es la mejor película de ese año. Así que alla voy:

1986: Cortocircuito
1987: La chaqueta metálica
1988: Beetle Juice
1989: Indiana Jones y la última cruzada
1990: Eduardo manostijeras
1991: La bella y la bestia
1992: Aladdin
1993: Pesadilla antes de Navidad
1994: Forrest Gump
1995: Apollo XIII
1996: Dragonheart
1997: La vida es bella
1998: El show de Truman
1999: The Matrix
2000: Gladiator
2001: Moulin Rouge
2002: Minority Report
2003: El Señor de los anillos: El retorno del Rey
2004: Spider-man 2
2005: Batman begins
2006: The Prestige
2007: 30 días de oscuridad
2008: Wall-E

Y como esto funciona en plan Mad max, por cada uno que hace el meme, tienen que hacer al menos otros dos, pues le paso la pelota a los más cinefilos de mis links: Mr. del Rio y Mr. RP.

PD: Me encanta esto de programar artículos, mientras esteis leyendo esto, yo voy camino de las islas Aran :-)

jueves, 23 de octubre de 2008

Blarney Castle

Cork tiene mucho que ver en sus alrededores. Y este viaje es sólo una prueba de ello.

Era sábado, nada que hacer, y la posibilidad de ir y volver en el día a Blarney, uno de los sitios turísticos por excelencia desde Cork. Y sin duda, una magnifica excursión.

¿Que es Blarney? Blarney es famoso por un castillo, pero la verdad es que es mucho más que eso, ya que al pagar su entrada, 8 euros for student. Entras a un paraíso natural, en el que podrías alcanzar el castillo en 10 minutos circulando en línea recta, pero a través del cual decides perderte durante dos o tres horas para encontrarte con lugares maravillosos.

Así vas cambiando de paisajes y entornos casi sin darte cuenta. Pasas por increíbles pinares, por cataratas, por lugares con plantas gigantes, por prados, por cuevas, por sitios con una flora increíble. Sitios cargados de mucha magia como sus carteles indican: circulo de las brujas o pila de rituales.

Y por supuesto, entras en sitios inimaginables para hacerte una foto. Tendrías que ver el pasillo por el que me metí para hacer la foto que veis en líneas anteriores. Atrás quedaron mis anécdotas sobre las cuevas de Ibdes.

Y al final, llegas al castillo de Blarney, y comienzas a subir y a subir, por una empinada escalera de caracol, cantando "Moonlight shadow" de Mike Oldfield. Y atravesando lugares con nombres curiosos como "Ladies and priest room". Amazing, the priest was very clever.

Y tras mucho subir, llegas a la parte de arriba, donde te tienes q colgar de un sitio que mira hacía el vacio, te das la vuelta y besas una piedra en la que han dejado sus babas centenares de ciudadanos sólo en lo que llevas de día.

Todo este ritual para ganar elocuencia, o eso es lo que prometen si besas la piedra. Mi inglés ha mejorado, ¿Será por besar la piedra o por que ya llevo más de un mes?

Y así concluye esta pequeña aventura realizada el pasado 11 de Octubre, poco a poco, me voy poniendo al día.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Descubrimiento del día...

La biblioteca de la Universidad de Cork se llama Boole Library.

Esto es evidentemente en honor al matemático George Boole, de donde se deriva la palabra Booleano que tanto usamos los informáticos.

¿Pero a que no sabías en que Universidad fue profesor de matemáticas G. Boole durante muchos años? ¡Premio! UCC

Aiiss... si es que al final, Cork va a ser algo más que cabras y vacas pastando en prados :-).

martes, 21 de octubre de 2008

Looking for friends

Una de las asignaturas con las que mas me asuste al llegar a Cork por problemas de convalidación fue OPGC.

La única opción que había encontrado remotamente parecida era una asignatura de postgrado y el departamento de Marketing no me dejaba cogerme tal cosa. Por suerte, una amable señorita, me hablo de otra asignatura del undegraduate que se parecía bastante a la que había elegido y que no tendría problema en coger.

OPGC es la única asignatura que realmente es importante que apruebe en Cork y me estaba dando problemas.

Unas conversaciones más tarde con mi coordinador, conseguí que me la aceptara y así me metía en una asignatura de la cual sólo tengo una clase una vez a la semana a cambio de ser anual, en un edificio perdido y fuera del campus y al que me cuesta más llegar que la clase en si.

La gracia de todo esto, es que la asignatura es totalmente práctica, por lo que hoy he tenido que asistir a mi primera tutoría, en la cuál, me han juntado con un grupo de 4 personas más con las que debo desarrollar un proyecto juntos. Y esa será nuestra nota final.

El problema... os recuerdo que soy el único español en casi todas mis asignaturas y en esta, hasta soy el único erasmus. Así que he acabado en un grupo rodeado de irlandeses: Emma, Sean, Ciara y Sophie, y encima Sean es el típico pelirrojo irlandés.

En la asignatura, tenemos que hacer reuniones semanales, seguir todo en un diary log y escribir informes... ¿De que me suena todo esto? ¿Por qué me ha venido a la cabeza esta imagen?

Y lo que es más importante: ¿Dónde esta mi editora de documentos cuando la necesito?

Ahora se lo que sintió Andie cuando se vio rodeada de extraños de tierras lejanas. Al menos hablabamos su mismo idioma. A ver si el cuento acaba igual de bien que acabo el de proyectos.

Nota mental: este post me recuerda que un día tengo que hablar de mis asignaturas. A ver si saco tiempo.

lunes, 20 de octubre de 2008

Bray

Siempre se agradece ver un poco de mar. Allá vamos.

Como dije no hace mucho, Dublín se visita en muy poco tiempo, por lo que era el día 7 de Octubre y estábamos cargados de energía para hacer una escapada a algún sitio cercano. En el Hostel nos recomendaron dos lugares, un pueblecito con un castillo o Bray, un pueblo situado con orilla del mar.

Por suerte, elegimos mar, y es que me encanta ver el mar, y aunque mis compañeros de viaje no quedaron tan entusiasmados por esta visita, tal vez porque yo era el único de interior. Gallegos, catalanes y vascos dan fe de ello.

Además creo que también fue la primera vez que visite una playa con abrigo, una experiencia muy distinta a la típica del verano. Y que me hace pensar que si viviera en una ciudad costera, pasaría más tiempo andando por la playa que en casa.

Fue una pequeña excursión, relajante, y sobretodo lo que digo siempre sobre estas excursiones, son lo mejor para evitar quedarse sólo con la imagen de una urbe, porque un país es mucho más que sus ciudades. E Irlanda especialmente creo que cumple esto.

Por supuesto, siendo una excursión incluida en el viaje a Dublín, no podían faltar las anécdotas extrañas. Y es que Bray, tiene una montaña con una cruz arriba y esto provoco que el grupo se dividiera en tres partes, una que subió hacia la cruz por senderos ocultos, otra que fue por un camino que rodeaba la montaña y una tercera parte en la que estaba viendo el puerto y la playa.

Al final, mi grupo no vio nada especial. El que subió a la cruz, se acabo perdiendo y acabaron a kilómetros del pueblo perdidos teniendo que hacer auto-stop. Y el que siguió el sendero encontró un acantilado lleno de focas, la lástima es que no llevaba cámara.

Y cierro el artículo con la mejor de las fotos que tomamos en Bray, y que sin duda pasa a ser una de las mejores fotos que tengo. De nuevo, otra en plan "Beatle".

sábado, 18 de octubre de 2008

Viaje a Dublín - Parte 4

Disco in the night!

Siempre había una cosa que quería hacer en mis anteriores viajes y era salir una noche de fiesta, me llamaba la atención eso de salir de noche en una ciudad extranjera. Sin embargo, nunca había podido, recuerdo esa noche de Halloween en Londres sin saber a donde ir, con el miedo de quedarnos en la calle pasando frío por no tener noche de hostel en ningún sitio.

Aunque peor fue lo ocurrido en Roma, donde teníamos la zona de marcha a una gran distancia del hostel, y el día que salimos, acabamos dos horas aguantando la chapa de un argentino fan de Hugo Chavez.

Como siempre decía, esto de salir de marcha en una ciudad extranjera es un poco complicado. Es como si un turista estuviera en el actur buscando la zona de marcha. Si no sabes a donde ir, es un problema. Sin embargo Dublín lo tiene muy fácil, más que nada por su cultura hacia el alcohol, ya sabéis, las visitas recomendadas son a las fábricas de Guinness y Jameson. Y uno de los sitios turísticos por excelencia es el Temple Bar. Un simple pub, alrededor del cual se ha montado toda la zona de marcha.
Esta foto es de la visita a la Jameson.
La fábrica es peor, pero la cata es mejor.

Mejor el whisky que la cerveza.

Así que en este viaje, por primera vez pude salir en el extranjero y visitamos además una de las discotecas más importantes de Dublín, llamada "Q" y que esta cerca del edificio de Heineken. El sitio confirmo lo que llevo viendo en Irlanda desde que llegue, aquí están todos salidos. Vi como todos los chicos se giraban ante la amiga que iba delante mio, mientras uno de ellos le tocaba el pelo y se chupaba la mano después.

Y las chicas, pues no se quedan cortas, o más bien si, porque las minifaldas que llevan acaban antes de que acabe el culo, y con un poco de suerte igual no lleva nada más que el vestido puesto, y cuando digo "nada más" es "nada más".

Luego están también las chicas versión "rebelde way", abundan mucho por estas tierras y van vestidas como colegialas salidas, ya sabéis, minifalda, camisa desabrochada, corbata desanudada, aun no se han enterado que el sábado no es día de cole.

La prueba de que sobrevivi a Q

Y en definitiva... ¿Qué tal la experiencia de salir en un país extranjero? Pues la verdad es que indiferencia, posiblemente me hubiera llamado más la atención antes, pero es que desde el tiempo que llevo en Irlanda y tal vez por el hecho de llevar el chip de vida normal en lugar de vida turística me siento igual que en casa. Con "vida normal" me refiero a hacer la compra, ir a clase, cocinar, etc.

De hecho al respecto de este viaje, llama la atención como de nuestras bocas saltaban expresiones como "Quiero volver a casa", "Mañana ya estamos en casa", etc. Refiriéndonos siempre en todo momento a "casa" como Cork y no como nuestras respectivas ciudades.

Y eso es todo por Dublín, cierro este capitulo de cuatro partes. Aunque aun queda más que contar de este viaje que me reservo para el próximo artículo.

viernes, 17 de octubre de 2008

Viaje a Dublín - Parte 3

El capitulo de hoy se titula : Prison Break.

No lo se, pero imagino que un capitulo que mucha gente se dejara en sus viajes a Dublín será el de visitar su famosa cárcel: Kilmainham Gaol. La razón es que está bastante apartada del centro de Dublín y además, no creo que en el mundo haya muchos pirados como yo que quieran visitar una cárcel.

Pues puedo afirmar, que tras visitar Kilmainham, es sin duda lo mejor de Dublín y lo anoto como visita obligada para todos aquellos que en un futuro me pregunten "¿Qué puedo visitar en Irlanda?". Además, lo más increíble de todo, su precio, no llega a los 3 euros la entrada, y tras haber pagado 11 por visitar la Guinness, sólo puedo decir "Oh my god! Oh my guinness!".

El lugar en si es terrorífico y tiene ese aire de terror y crueldad en el ambiente que me dejo absolutamente fascinado, más aun cuando al iniciar la visita te dejan ver un vídeo con grabaciones reales de niños que estaban encerrados en la misma cárcel que tu ahora estas visitando. O cuando entras a una celda de unos dos metros cuadrados y te dicen que las utilizaban para encerrar a cinco personas y encima en las celdas no había ni cristales en las ventanas para protegerse del frio.

Sin duda, el mejor momento de la visita es la llegada a la sala central de la cárcel, cuando te encuentras con la siguiente imagen:

Y es entonces cuando te hablan de todas las películas que se han rodado aquí. "En el nombre del padre", "Michael Collins", "Las aventuras del joven Indiana Jones", etc. Sin duda, tras esta visita tendré que hacer un repaso a ciertos films.

Me voy de este lugar con la sombra de la muerte a mis espaldas, más aún después de haber visitado el pequeño museo que acompaña a esta prisión y haber contemplado en una sala, decenas de cartas escritas por presos. Últimas palabras de muchos presos antes de ser ejecutados, se te encoge el corazón al leer algunos de los pasajes de estos documentos.

Los penitentes se arrodillan

Y tras esta terrorífica visita, mañana algo más agradable: Dublin in the night.

jueves, 16 de octubre de 2008

Viaje a Dublín - Parte 2

Un paseo por Dublin.
La mejor forma de ver una ciudad, es paseando por ella. Y eso hicimos en Dublin, andar mucho y pasar por las mismas calles una y mil veces. Hasta nos dio tiempo de hacer la visita turística de tiendas por H&M, Zara, Pull and Bear o Penneys.

Y en mitad de todo este paseo, veíamos varias veces "el Spire" que es sin duda la obra arquitectónica más peculiar de Dublín y que se puede ver a mis espaldas en la foto. Se trata de una enorme aguja situada en O'Connel la calle principal y cuyo uso es nulo, puramente decorativo, olvidaros de todas esas historias típicas del estilo CN Tower o Torre Eiffel sobre su uso como torre de comunicaciones. Eso si, cabe decir, que como elemento decorativo, me molo bastante. Impresiona, sobretodo desde su base.

Otro sitio clásico por el que pasear es el Trinity College, universidad donde te encuentras con la siguiente imagen nada más entrar:

¿Bonito, eh? Pues la verdad es que me defraudo bastante. Esperaba algo mucho más bonito, y es que caray, la Universidad de Cork es cien veces más bonita que el Trinity College y también cien veces menos conocida. Y en medio de todo este sitio, me volví a encontrar con mi amigo "esfera dentro de una esfera" a quien ya conocía de New York y El Vaticano.

¿Os acordáis de mi artículo hablando sobre esta pelota dorada? Ya van tres

También por la calle encuentras esculturas como la de James Joyce, y es que aquí, este señor y Oscar Wilde son tratados como eminencias por sus raíces irlandesas. Atentos a la mujercilla del cigarrillo, no pensareis que me iba a despedir del artículo sin una de estas típicas fotos "freak" que tanto me gustan.


Y finalizo este paseo entre fotos con otra más, la que todo el mundo se hace y no podía ser menos. Me refiero a la típica foto metiéndole mano a Molly Mallone. Pero esta vez en versión orgía, ya que nos la hicimos todos juntos.

Me falto visitar el parque situado al sur de la ciudad, St. Stephen's Green, al que llegue el último día cuando acababan de cerrar las puertas, tal vez debimos de haber pasado menos tiempo en Penneys. Pero aun me queda alguna cosa más que contar, así que mañana seguiré hablando de Dublin...

miércoles, 15 de octubre de 2008

Visto en Cork

La semana pasada iba andando por la Universidad y me encontré con el siguiente cartel:


Hasta aquí todo normal, una celebración universitaria en domingo. Pero os sugiero que ampliéis la foto y os encontrareis con esto:


Dice el cartel: "Special Mass at 12.00 p.m. for El Día De la Hispanidad and The feast of La Virgen del Pilar (A national holiday in Spain and Spanish America)".

Bueno, aun todavía no he encontrado a nadie que sepa situar a Zaragoza en el mapa, pero al menos esto es una muestra de que nuestra ciudad existe más allá de los Pirineos.

Por cierto, fui a la fiesta esta de la Hispanidad. Una mierda, un grupo de música tocando, quince escuchando, y un stand con trozos de chorizo que se llevaron en cuanto apareció la orda española.

Viaje a Dublín - Parte 1

Sigo con mi versión retrasada de artículos. Hay mucho que contar y poco tiempo para escribir, así que hoy dedicare el artículo al viaje que realice a Dublin entre el 4 y el 7 de Octubre. Evidentemente, necesitare dos o tres partes para completar lo que fue este recorrido.

Primera parte de la visita, y me voy ya a la Guinness

Dublin no es una ciudad muy grande, algo así como 500.000 habitantes, y viniendo de una ciudad con unas 200.000 personas más, se nota. La ciudad en si es muy parecida a Cork, digamos que ambas tienen el mismo estilo aunque diferentes dimensiones evidentemente.

La ventaja de este tamaño es que es muy fácil de visitar, y en un sólo día puedes tener una imagen muy clara de Dublin, en dos días profundizar en la ciudad y en sólo tres conocerla al dedillo.

El peor recuerdo de este viaje ha sido el hostel, sobre el que todo los días teníamos algún problema, los problemas de la primera noche, gente que cayó enferma, gente que decidió largarse, de todo... esto hacía que cada día la visita empezara con un paseo por recepción a contar nuestros problemas a un nuevo empleado. De esta forma, cada uno hacía la chapuza que podía para solucionarlo una noche más y se iban pasando la pelota unos a otros.

Así que el primer día, tras problemas con el hostel, y una rápida comida en el Burger King hicimos una de las visitas obligadas en Dublin, la de la fábrica Guiness.

El lugar en sí, me era extrañamente familiar, tenía ese toque en plan "expo" y es que realmente el museo de la Guiness es eso, una pequeña expo de la cerveza. Vas pasando por salas donde hay cascadas de agua, olores, audiovisuales, efectos de luces, letreros, cosas así. Cómo digo, en plan expo.

A mitad del trayecto, la visita se detiene a hacer una cata de cerveza. Ahí te dan un pequeño vaso que evidentemente puedes repetir todas las veces que quieras por si quieres salir pimplado a la siguiente parte de la visita. Lo cierto es que no es la primera Guiness que bebía, llevaba ya aquí casi un mes, y en ese tiempo ya me había bebido unas pocas, la primera vez no pude acabarla de lo desagradable que me resultaba y ahora ya me los puedo beber enteras. Aun así, me siguen sin gustar y no conozco todavía a nadie en este erasmus que haya dicho, me gusta la Guinness. Es curioso ver el éxito de una cerveza que no convence a nadie. Como diría Obelix "Están locos estos irlandeses".

Cheeeeersss!

Y la visita continua en modo "expo" subiendo y subiendo plantas, siete en total, hasta completar el proceso e historia de como se hace una cerveza Guinness. Y al final, si necesitabas más cerveza, llegas a un bar en la torre, todo acristalado y desde donde ves unas magníficas vistas de Dublin. En este sitio puedes disfrutar de otra Guinness más gracias a que tu entrada viene acompañada de un vale para que te den una consumición en este bar.

En definitiva, a seguir bebiendo cerveza. Es curioso ver la afición de este país hacía esta bebida, sobretodo cuando ves que han adoptado el sistema métrico decimal en todas las cosas, menos en una, la cerveza, que se sigue sirviendo en pintas, como también se hizó (supongo que por imitación) en países como el nuestro, pero claro, una pinta es algo más de medio litro, así que cambiar al sistema métrico podría hacer perder algo de cerveza por vaso, y eso, un buen irlandés no lo vería correcto.

Mañana sigo hablando de este viaje a Dublin. Así que mañana prometo más y mejor.

lunes, 13 de octubre de 2008

El primer día en la Universidad

Este artículo lo tenía que haber escrito el día 22 de Septiembre, cuando fue el primer día. Pero lo he ido postponiendo hasta hoy.

Siempre se recuerdan los primeros días. El primer día en el C P S, el primer día en mi instituto, el primer día que trabaje, y por supuesto, el primer día de clase en Irlanda.

El primer día en mi universidad irlandesa fue bastante "freak". Nada más llegar, me meto en el O'Rahilly, el edificio donde me tocaba la primera clase y medio perdido encuentro el lugar, aunque cuando ya todo el mundo esta sentado, por lo que me toca en una esquina, donde no se ve bien la pantalla. Un lugar no muy bueno, para alguien que no es de habla inglesa.

En frente de mí, hay un tío con un portátil, esta jugando al Command and Conquer, y lo mejor es que sigue jugando durante la próxima hora, no importa que la clase empiece. A mi derecha, un irlandés tartaja que se parece a Rick Moranis. Imaginense mi oído intentando entender si eso es algún tipo de extraño acento irlandés o en su lugar es un defecto en el habla como poco a poco he ido notando. Además al personaje le encanta intervenir en clase.

Empiezo a mirar. ¿Dónde están los otros erasmus students? Alguien más tiene que haber de España. No reconozco a nadie, y en su lugar veo chinos, chinos en cantidades industriales. De hecho, en la clase no hay ninguna chica irlandesa, todas las que hay son chinas. Empiezo a descubrir lo que luego confirmo, en Computer Science no hay apenas erasmus.

Aparece el profesor, 15 minutos tarde, con su mochila y sin decir nada se sienta y enciende el ordenador que va conectado al proyector. Empieza la rutina que es habitual durante las próximas semanas, problemas para entrar en su página web, para descargarse el powerpoint, problemas con la bombilla del proyector. Le pasa de todo a este hombre.

El hombrecillo fan de los chinos. En lugar de contarnos cosas de la asignatura, nos empieza a contar cosas de china y de sus ciudades. Al acabar la clase, decido presentarme, cuando le digo que soy español casi me ignora respondiendome "Ok. I'll see you in the next lecture".

La clase acaba, una hora libre y me voy a otra. Al llegar empieza a ser todo muy raro, descubro que la asignatura pertenece a un master de Multimedia, no en si a la carrera de Computer Science. Así que en lugar de encontrarme con la presentación de la asignatura, me encuentro con la presentación del master, con todos los profesores ahí junticos.

Un rato de chapa después, aparece un tío con unos sobres y empieza a repartirlos entre la gente. Los sobres contienen una tarjeta de acceso al Multimedia Lab, un sitio lleno de MACs, todo esto me empieza a parecer muy formal y extraño. Tras ello, aparece un chino (otro chino), con una cámara de fotos (esto no es novedad en un chino) y nos mandan ponernos a todos en fila para hacernos una foto de carné.

Yo pregunto al profesor para que es esta foto. Me afirma que para la página web. Todo demasiado extraño. Y tras la ronda de fotos, nos deciden llevar en visita guiada a todos los lugares donde se desarrollan y desarrollaran las clases. Es decir, laboratorios, edificios, etc.

De repente, hay un momento en el que me pierdo, dejo de orientarme y no se donde estoy, pero estoy en un lugar rodeado de casitas, nos meten en una. Ahí hay una donde dentro tienen un estudio de sonido, con mesa de mezclas, y un profesor flipado que nos pone una canción a tope. Por lo visto es para las asignaturas de audio, yo no tengo ninguna.

Salimos de ahí y acabamos la visita en el pub de la Uni. ¿Hay un pub en la universidad? Pues si, increíble, yo lo descubro precisamente ese día también. Y el tour termina con alumnos y profesores tomando cañas en el pub de la Universidad. Estas cosas no pasaban ni con Germán.

Vuelvo a mi casa preocupado. Tarjetas de acceso. Gente de edad avanzada como compañeros. Las palabras master y postgraduado. Salas con ordenadores MAC. ¿Es buena idea seguir con estas asignaturas? O me he cogido cosas muy dificiles...

Para eso, necesitaba más perspectiva, más días de clase, y eso ya, es otra historia para otro artículo. Algún día hablare de mis asignaturas.

domingo, 12 de octubre de 2008

Erasmus party for a kid

La rutina busca la inspiración.

Cuando ya llevas un mes aquí (si, ayer hizo un mes) ya no sabes como organizar la próxima fiesta, o que hacer. Así que ahora hemos llegado al punto de organizar fiestas temáticas como la hippie party.

Yo el otro día vi una clara oportunidad de organizar una fiesta curiosa, el hermano de una amiga venía a visitar la ciudad en una fecha muy cercana a su cumpleaños, y se podía montar una fiesta clásica de cumpleaños, como las que hacíamos cuando eramos niños, con bocadillos de nocilla, de york y queso, con fantas y coca colas. Y además, todo ello pintando globos. Aunque su hermana inicialmente no quería que nos encargáramos el resto de trabajar, yo me empeñe en organizarla porque sería algo diferente y muy divertido.

Me gusto mucho este día, en especial por poder hablar con gente de rangos de edad muy diferentes a los que llevo hablando ultimamente, me refiero a los padres y al niño. Parece que últimamente vivo en esa burbuja donde todo el mundo que existe es joven. Se me hizo extraño algo tan simple como volver a hablar con un niño o con alguien mucho más mayor que yo.

PD: Conseguimos hacer llorar al niño. Así que la fiesta fue un éxito ;-)

viernes, 10 de octubre de 2008

Reprografía

La UCC reinventa la reprografía.

Parece demasiado feliz, así que fijo que no trabaja en reprografía

Reprografía siempre ha sido un sitio muy querido por todos los universitarios. Sus largas colas, sus amables empleados y su habilidad para poner grapas en sitios nunca antes imaginados hace que les hayamos dedicado en todos estos años largas composiciones literarias de insultos.

Mi actual universidad, la UCC ha solventado al fin este problema con un sistema maravilloso que consiste en directamente eliminar al personal de este departamento. Para ello, hay salas de ordenadores de uso libre, donde a su vez hay impresoras de uso libre.

Conclusión: puedes imprimirte lo que te de la gana, como tu quieras, y cuantas veces quieras. Yo ya lo estoy usando para imprimirme billetes de avión y demás documentación. La gente se imprime libros y manuales de cientos de páginas.

¿Para cuando se pondrá este sistema en la Universidad de Zaragoza?

martes, 7 de octubre de 2008

119, La habitación del pánico

Posiblemente esta sea la historia que más veces voy a contar en mi vida.

En mis casi 22 años de vida me han pasado historias y anécdotas muy curiosas que siempre acaban saliendo en conversaciones porque me encanta contarlas. Desde accidentes ferroviarios, a pueblos terroríficos de Asturias o a personas que paran el espacio-tiempo. Si, algunas veces la gente dice que todo me pasa a mi.

Sin embargo, lo vivido por mi el sábado, va a ser una de las historias que más veces voy a contar posiblemente, porque es el surrealismo hecho realidad.

Y la historia empieza así...

Este fin de semana, he estado en Dublín (hablare de este viaje más adelante) y nos hemos alojado 11 spanish from Cork en un sitio llamado Isaacs Hostel. En este sitio, nos ha pasado de todo, desde reservas que no estaban completas a problemas con gente que se volvió antes para casa por estar enferma, algo que ha hecho que todos los días la visita a Dublín empezará con conversación de media hora con la persona de recepción explicando la situación actual en cada momento.

Las reservas las hicimos en diferentes grupos, y por tanto, no íbamos a estar en la misma habitación todos. Yo me hospedaba en la 119 junto a Diana y Paula, y en una habitación para 14 personas. Al llegar al lugar en si, nos echa para atrás un terrible olor que viene de una zona de las camas que al menos esta alejada de las nuestras.

Y llega la noche. Marina me llama asustada de otra habitación, porque le han quitado su cama. Al llegar, la suya estaba cogida y en recepción le dijeron que cogiera una de las libres y ahora, esta había sido ocupada también. Aterrada, decide bajar a nuestra habitación y compartir cama con otra de las chicas.

Y la noche empieza. Son las 00h. Paula se ha ido de fiesta, y Marina, Diana y yo estamos tumbados cada uno en una cama. De momento la habitación esta casi vacía, sólo una chica francesa y un individuo de origen desconocido habitan en ella.

Todo esta tranquilo, pero no podemos dormir ninguno, lo típico, las literas son incomodas, la cama diferente a la que estas acostumbrado, etc. Los típicos problemas de "primera noche".

Sobre las 01:00h viene un hombre que ocupa una litera que hay justo en medio, la que nos separa a mi de las chicas. El hombre, es francés también, lo sé porque había hablado con él esa misma tarde. Entonces ya empiezan las cosas raras, el hombrecillo se sube a la litera de una forma muy extraña, haciendo ruidos raros y apoyandose con el pie sobre mi cama. Yo me hago el dormido, simplemente me limito a observar con una sonrisa en la cara. A los 5 minutos ya esta roncando, un sonido infernal.

Son las 02:00h o así, es imposible dormir en la habitación con tanto ronquido. Entonces de repente se oye un "¡PAM!!!". Abro los ojos, el francés no esta en su cama y mi mente enseguida construye que ha pasado, se ha caído de la litera. Desde unos 2 metros de altura.

En ese momento, no se que hacer, si esperar, si decir "Are you ok?" o si bajar a ayudarle. Sin embargo, el hombre empieza a hacer de nuevo respiraciones extrañas y se empieza a arrastrar por el suelo como un gusano hasta que llega a la puerta. Sale de la habitación y empieza a pegar gritos y a golpear las paredes. Marina y yo, intentamos controlar la risa para evitar despertar a los demás.

Tras 15 minutos o así en los que no me para de doler la tripa de tanto reírme, el hombre vuelve a la habitación, realiza el mismo número circense para dormir y se tumba de nuevo en la cama. A los 5 minutos vuelve a estar dormido y con una pierna y un brazo colgando hacía el abismo del que ya se cayó una vez.

Y la historia continua. Serán ya las 03h, sigo sin dormir. Entonces aparecen dos americanos totalmente borrachos y encienden la luz sin ningún pudor por los que estamos durmiendo, o más bien intentando dormir. Los tíos se ponen a hablar, cada tres palabras, una es "fuck" o "fucking". Se abren unas cervezas, y se ponen a beberselas en mitad de la habitación mientras nos hacen un concierto acústico de pedos y eructos. Todo esto acompañado de los dos recorriendo cama por cama, y observando a la gente.

Al acabar, se empiezan a desvestir, y uno de ellos, empieza a tirar la ropa hacia todas las direcciones, una zapatilla cae sobre mi almohada, a escasos centímetros de mi cara. Se van al fin a dormir.

Entonces llega Paula, se mete en la cama de Diana y Marina baja también a contarse entre ellas la historia de todo lo que ha pasado, empieza de nuevo el ataque de risa. Y en ese momento, sobre las 04:00h aparece un grupo de unos cuatro australianos. Por supuesto, encienden la luz, y la primera imagen que se encuentran es a tres chicas metidas en una cama. Los tíos empiezan a hacer bromas entre ellos, y a gritarnos al resto de los que estamos en la habitación "Hey, guys! Spanish sex". Comienzan una serie de insultos hacia ellas pensando que no entendemos el idioma.

El punto final, lo pone cuando uno de ellos se sienta en la cama de delante a sacarles fotos. En ese momento, cogemos todas nuestras cosas y nos largamos pitando de la habitación en una extraña mezcla entre risa, terror y falta de sueño. Al grupo se une la chica francesa que había citado al inicio de la historia.

Bajamos a recepción a quejarnos. Le explicamos la situación al idiota de turno, sube y vuelve a bajar, en ese momento nos suelta un "Aquí no podéis estar, porque podéis despertar a la gente. Os tenéis que bajar abajo". Por supuesto, no soluciona nada.

Abajo es en cuestión los sótanos, véase la imagen.

Este lugar, es una sala común con televisión, máquinas de bebidas, una mesa de billar y cosas así. Convertimos los sofás en improvisadas camas y ahí intentamos conciliar el sueño, mientras explicamos nuestra historia a todo el que pasa, incluidos a unos escoceses que montan botellón a nuestro alrededor y se ponen a tocar la armónica.

A las 6:00h, la sala se queda vacía y todos caemos rendidos ante el sueño. Son las 7:30, suena la alarma del móvil, hay que despertarse y sólo hemos dormido hora y media pero al menos sobrevivimos a la habitación 119.

Por supuesto, nuestras quejas hacen obligar al personal a cambiarnos de habitación, de hecho, nos juntan a todos y nos dan una exclusiva para el grupo de españoles. Aun así, de los 11 iniciales, el último día volvemos sólo 6, los otros cuatro cayeron por el camino.

Y como capitulo final, el último día se une al grupo Tamara, una erasmus también que se había vuelto a España unos días y que hace escala en Dublín para estar un día con nosotros. Evidentemente, ha hecho la reserva por su cuenta... Adivinad que habitación le toco. La 119 por supuesto, menos mal que la colamos en una cama de las libres en nuestra habitación.

viernes, 3 de octubre de 2008

Same life, different persons

Lo que es y no es el erasmus.

Oh my god! Oh my guinness!

Llevo ya casi un mes con mi erasmus, y por tanto estoy en posición de poder contar lo que es y no es el erasmus. Para ello, volvamos un poco la vista atrás, cuando llego febrero apareció la oportunidad de irme de erasmus en mi universidad, yo llevaba ya meses con la idea clara de irme.

Y la razón era evidente, estaba quemado. En una rutina de vida que no me gustaba, hasta las narices de alguna persona y sin posibilidades de aspirar a algo diferente. Durante mucho tiempo escuche eso del erasmus es una experiencia única en la vida, que es un año único e inolvidable, todas esas historias que todos los que estamos en tierras extranjeras este año escuchamos. Porque seamos sinceros, ¿Quién abandonaria por un erasmus una vida en la que fuera completamente feliz? Nadie. Todos los que emprendemos este viaje es porque queremos vivir una vida diferente.

Desde mi punto de vista, y a día de hoy, puedo decir que todo esto es un mito. Aunque claro, es mi punto de vista. Lo que quiero decir, es que mi vida es exactamente igual a como era en Zaragoza, no encuentro diferencias, e incluso en este tiempo he conocido a personas y he vivido situaciones que me recuerdan mucho a la vida pre-Cork. De hecho, hasta algún nombre se me ha escapado llamando a una persona, por recordarme demasiado a otra.

Aún así digo que mi punto de vista es bastante particular en este aspecto, porque el erasmus esta formado por una serie de cosas que pueden impresionar a mucha gente y que a mi sin embargo me suenan a rutina. Me refiero por ejemplo a cosas como conocer a mucha gente, esto podría estar genial, si no fuera porque la última década de mi vida ha sido así por estar tan metido en un mundo donde no para de entrar y salir gente como es el cine.

También es agradable siempre el intercambio cultural, el interesarte y descubrir cosas de otros pueblos y culturas. Pero en eso tampoco es ninguna novedad para mi, para una persona cuyos gustos y aficiones se han decantado siempre hacía una cultura más anglosajona que latina, y a la que no le ha hecho falta conocer americanos y americanas, para saber que la población de EE.UU. son gente muy maja. Estoy citando ejemplos de cosas que he visto por aquí.

Noto aquí también bastante la sensación de soledad. La de estar rodeado de mogollón de personas, ver que entre ellos son como una piña, pero no creer que encajo en este grupo en su totalidad y muchas veces, pensar que encajo menos que los demás. Una sensación que también la sentía en Zaragoza, la de estar sólo rodeado de tanta gente.

La única sensación peculiar aunque no es extraña es que el tiempo pasa muy rápido a la vez que muy lento, es decir, los días pasan rapidísimos, pero cuando miras atrás das la sensación que llevas toda una vida de erasmus, yo no llevo ni un mes, y ya tengo la sensación de llevar un año. Y la persona que conocías un lunes, puede ser ya una gran amistad el viernes. Pero como digo, no me resulta extraño, porque esto ocurre siempre que juntas a mucha gente a convivir juntos, de ahí que alguien inventara Gran Hermano.

En definitiva, no estoy mal en mi erasmus, pero tampoco es esto la releche. Simplemente, estoy igual que cuando estaba en Zaragoza. No añoro mi ciudad, ni tengo ganas de volver, pero tampoco me daría pena abandonar Cork. Supongo que si realmente hay una vida para mi diferente en algún sitio, no es ninguno de los dos sitios o más posiblemente, nunca la encuentre porque no exista.

En fin, esta es mi opinión a casi un mes de erasmus, y puede que sea un pronostico de como será mi vida durante los próximos ocho meses, ya que últimamente parece que este ritmo de vida erasmus no empieza a aportar elementos nuevos, sino que ya empieza a convertirse en rutina. Y nunca me gusto la rutina.

UCC

Voy a hablar un poco de mi Universidad.

Cork tiene dos campus universitarios. Uno de ellos es la UCC, es aquél campus donde están las carreras de ciencias, de económicas, de marketing, las de letras, etc. El campus esta situado a 20 minutos andando desde el centro. El otro campus se llama CIT, y esta orientado a las carreras técnicas, las ingenierías y demás historias, situado a unos 45 minutos de la UCC, es decir, más de una hora de distancia desde el centro, una burrada.

Conclusión de esto, el campus del CIT se ha convertido en el clásico paraíso de la homosexualidad como se intenta crear en Zaragoza. Un campus sólo orientado a ingenierías y donde la existencia de baños para chicas es casi hasta innecesaria. Yo en cambio, aquí he tenido la grandisima suerte, de no ser ingeniero fuera de España y ser Computer Science, por lo que estoy con el resto de científicos en la UCC. Y lo que es más importante, en un campus lleno de población femenina.

Y es que esto es Cork. Un lugar donde el 80% de los estudiantes erasmus de la UCC son mujeres, porque casi todas las plazas erasmus están orientadas a carreras como ADE. Algo que evidentemente tiene su parte positiva (no voy a negar que me agrade la situación), pero también su lado negativo.

Somos tan chulos, que nos hacemos fotos en plan Beatles y todo.

Lo que peor llevo es el hecho de que no haya erasmus en mi carrera, de Computer Science, sólo se de la existencia de tres personas: yo, y dos chicas de tenerife, una es mi compañera de piso y la otra se que anda por ahí con un par de módulos. Además, estas dos, están con proyecto y yo con mil módulos, así que mis días en clase son un poco aburridos, rodeado de irlandeses y sobretodo chinos, porque con Europa no harán mucho intercambio, pero con China demasiado.

La Universidad tiene un edificio principal muy importante, al que llamamos "El castillito", muy en plan Harry Potter, y luego tiene diversos edificios para el resto de facultades. Como el O'Rahilley, el Kane o el Boole.

El Kane es el edificio de ciencias y realmente es el peor, al menos el más feo. Lo cuál puede parecer una desgracia, el que justo te toque estudiar en el edificio más feo teniendo un campus tan bonito.
Kane Building, más feo que pegarle a un padre

Sin embargo, la realidad no es esta, y es que el que un edificio sea de ciencias o de management no importa, eso sólo significa que ahí están los departamentos. Las lectures (clases teóricas) pueden ser en cualquier edificio, y por tanto, todos acabamos pasando por todos varías veces. Lo cual también es un pequeño jaleo, porque las clases empiezan y acaban a "en punto", y muchas veces tienes que cruzarte todo el campus en un descanso inexistente.

Sin embargo, el poder de la UCC no acaba ahí y se extiende a toda la ciudad de Cork, creando otros edificios de los que es propietaria la Universidad pero que no tienen porque estar dentro del campus. Tengo un día una clase en un edificio off-campus llamado Brookfield al que me cuesta más ir y volver, que estar en la clase en si.

Student Center, o sea: cafetería, tiendas... e incluso ¡Un pub!.

Dicen que hay más chicos de erasmus en el CIT, en casi un mes, los he visto sólo dos veces. Pobrecillos. Otro día, seguiré contando cosas sobre las asignaturas.

Momento de finalizar el artículo, tomándose un
Hot Chocolate en el Starbucks de la UCC

miércoles, 1 de octubre de 2008

Corcaigh

Hoy unas pocas fotos de la ciudad donde vivo.

¿Quién vive aquí? ¿David, el gnomo?

Cuando decidí irme para Cork, empece a escuchar comentarios muy diversos sobre esta ciudad, comentarios que hablando con otros erasmus de aquí, también habían recibido. Estos eran muy contradictorios, algunos hacían referencia a que Cork era una basura de ciudad, que tenía una sola calle y que te aburría enseguida. Otros indicaban justo lo contrario, historias de gente que había venido aquí de Erasmus y se habían quedado por haberse enamorado de esta urbe.

Calle chunga de Cork

¿Qué ocurría entonces con Cork? No lo podía saber hasta que viniera. La explicación a ambos comentarios es simple, Cork es una buena ciudad para vivir, pero turísticamente se consume tan rápido como una cerilla.

Cuando llegue al aeropuerto y me recogió un taxista sus palabras fueron "Cork is a friendly city", y creo que este adjetivo (friendly) es la palabra que mejor lo describe. Es una ciudad, en la que al día siguiente de haber bajado del avión, te puedes encontrar con un pasajero por la calle. Un lugar donde tras haber salido de fiesta un día y haber soportado a un irlandés borracho, al día siguiente pasa al lado tuyo por la Universidad. Una ciudad donde sólo me tengo que quedar cinco minutos quieto en la plaza principal del Campus para encontrarme a alguien.

Oliver Plunkett. La mejor calle para comprar lo que quieras, hay de todo.

Y en eso, tiene su encanto cuando llevas ya un tiempo viviendo aquí. Tienes todas las ventajas de vivir en una ciudad, y a su vez todos los encantos de estar en un pueblo. Y en el caso de un Erasmus, tras lo que he visto en mis viajes, las mejores ciudades para estar estudiando son siempre aquellas pequeñas dominadas por estudiantes. Por ello, si eres estudiante, es mejor vivir en Salamanca que en Madrid, es mejor Oxford que Londres. Así que estoy contento con la elección de Cork como destino.

El lago de Cork, reserva natural.
Aunque las latas de cerveza flotando digan lo contrario

Sin embargo, es posible que algún turista pase por Cork, tras una visita por Dublín y se quede pensando que perdida de tiempo al tener poco más que un parque, un par de catedrales y un lago, pero si se quedara a vivir tan sólo un mes, Cork ya no sería lo mismo para él.

Una noche estaban todos los irlandeses meando en la puerta de este parque.
Al día siguiente, descubrimos que se llama Peace Park (pronunciación: Pis Park)

Lo que menos me gusta de Cork es como se ha construido la ciudad, ya que su formación es estirada y alargada, acompañando al río, en lugar de crear una forma más circular como por ejemplo puede ser Zaragoza. Esto hace que en lugar de estar todo a unos 10-15 minutos del centro, puedas tener lugares a 30 o 40 minutos. La Universidad por ejemplo, no esta en el centro y eso hace que todos los dias haya que dar un largo paseo.

Hablando este tema entre los erasmus, hemos llegado todos a la misma conclusión. Estamos muy contentos con nuestro destino, y todos sabemos por erasmus anteriores en Cork que alguien no volverá. ¿Quién será? Yo ya empiezo a hacer mis apuestas :-).

Nos vemos en el próximo artículo