¡Allá vamos otra vez, y esta vez con RyanAir!
Este artículo se esta publicando con el modo "automático" de publicación. Porque... ¿Donde estoy realmente ahora? Espero que en el aeropuerto de Londres harto de escuchar a Lady Gaga todo el día en el mp4, cansado de visitar las tiendas y posiblemente esperando a facturar de nuevo mientras leo un capítulo de Robín Hood.
Vuelvo a casa... o mejor dicho, vuelvo a Zaragoza. Las razones varias, la primera de ellas que compre el billete hace un par de meses por temor a una homesick que por suerte esta vez no tengo. La segunda razón es llevarme la mitad de mis trastos, al menos todo lo relacionado con el invierno como guantes, abrigos y demás para olvidarlos ahí hasta otra ocasión. Y la última y más importante, es porque tengo mi Fin de carrera, y yo nunca me pierdo una oportunidad de ponerme una americana.
Además hay que aprovechar para una puesta a punto, lo que significa básicamente dormir, fisioterapia y un buen corte de pelo.
¿Y al final cuanto va a estar en Zaragoza, señor Alberto? Pues simplemente 7 días, es más, realmente es menos de eso, ya que llego hoy lunes y el próximo lunés estoy partiendo. Y sin duda el billete de vuelta a Irlanda ha sido la decisión más difícil para mi y todos los corkianos. Ya que el pasado viernes acabe las clases y por tanto, la decisión es ¿Qué hacer en Abril? Sabiendo que tienes todo el mes libre hasta que empiecen los examenes. ¿Quedarse en España? ¿Quedarse en Irlanda?
Al final he optado por volverme aquí, a pesar de estar haciendo más o menos la decisión opuesta al 90% de los erasmus que conozco, pero personalmente, no me importa. Seguro que el tiempo que pase en Cork será mejor que el que pudiera pasar en Zaragoza.
Así que a lo dicho... si alguien me necesita por Zaragoza, estaré durante siete días. Ya sabéis mi numero. See ya!
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