Aunque parece el comienzo de un chiste, este artículo sin duda una muestra de los momentos surrealistas que estoy acostumbrado a vivir. Anna antes de venir a Cork, paso un día en Dublín y en el hostel hizo amistad con Pierre, un chico canadiense, al que le acabo dando mi móvil para que viniera a visitarnos cuando pasara por Cork.
Sorpresa la mía, cuando tengo que quedar con un canadiense que
no conozco de nada y se me presenta con un amigo brasileño que acaba de conocer.
¡Ale, vamonos todos juntos a Cobh!
Debido a que volvimos un día antes, el domingo era un día ideal para hacer una excursión a algún sitio cercano, así que vamos para allá. El destino: Cobh, un pequeño pueblo cercano a Cork, a media hora de tren y famoso por una razón, es la última parada del Titanic. Es decir, el Titanic paso por aquí, paro para que la gente hiciera un pis y luego se choco contra el iceberg.no conozco de nada y se me presenta con un amigo brasileño que acaba de conocer.
¡Ale, vamonos todos juntos a Cobh!
Cobh es sin duda la mejor oportunidad para poder ver el mar desde Cork, visitando además, un pequeño y precioso pueblo. Un sitio ideal al que ir en una tarde soleada de Octubre y olvidar las lluvias del día anterior. Y lo mejor de todo, es que el mismo bus que te lleva, para en Fota, lugar al que dedicare el próximo artículo.
Nos vemos en Fota.
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